El laboratorio catalán afronta la búsqueda de su quinto consejero delegado en cinco años. Es decir, Almirall va a consejero delegado por año. Gianfranco Nazzi abandona la compañía año y medio después de llegar al cargo en lo que habría sido una salida pactada y de la que poco más se conoce, más allá de que Nazzi buscará afrontar nuevos retos profesionales.
En sustitución, de manera temporal, el actual presidente no ejecutivo de Almirall, Carlos Gallardo, pasará a ser CEO interino hasta que se encuentre al nuevo candidato.
Desde 2017 las “fugas” en el sillón directivo de la catalana no han dejado de sucederse. Comenzando con la salida de Eduardo Sanchiz y unos resultados malos del laboratorio lastrados por el negocio de su filial en Estados Unidos.
Precisamente, las ventas en el mercado americano es una de las razones que el analista de Ibroker, Antonio Castelo, cree que está haciendo mella en el ánimo de los inversores con Almirall.
¿Qué firmas han apoyado a Almirall recientemente?
Las acciones de Almirall han rebotado en bolsa este viernes tras el descalabro de la última jornada, donde llegó a rozar el 6% en pérdidas a cierre de la sesión.
Hay quien ve en este desplome una oportunidad para hacerse con los títulos de la empresa. Los analistas de Bankinter se encuentran entre los más optimistas con el laboratorio y elevan su recomendación anterior de “neutral” hasta “comprar”.
¿Qué es lo que puede estar ocurriendo en los entresijos de Almirall? La compañía divide la opinión de los analistas
Entre los partidarios del valor también encontramos posiciones interesantes como la de Cobas AM. La gestora con Francisco Paramés a la cabeza destacaba como su operación más relevante en el último informe trimestral de su fondo ibérico la posición sobre la compañía, en la que ha alcanzado el 2,6% del capital.
Eso sí, en el lado contrario, Morgan Stanley recortaba la valoración y el precio objetivo de su acción hasta los 12 euros.
El valor ha sido hasta ahora apoyado por el consenso de analistas otorgando un precio objetivo de 13,50 euros, a pesar de haber perdido en bolsa alrededor de un 20% en lo que llevamos de ejercicio.
A pesar de ello, Castelo, recomienda "estar fuera del valor hasta que se despejen las dudas".
Almirall tiene todavía pendientes nuevas operaciones, como la aprobación por parte de la Unión Europea para que autorice la lebrikizumab para el tratamiento de la dermatitis atópica de moderada a grave. Una noticia que aportaría 450 millones de euros al laboratorio al año en ventas, pero cuya autorización puede prolongarse hasta un año.
¿Ha perdido Almirall la confianza de los inversores?
¿Qué esconde el valor para haber cambiado tanto la opinión de los analistas en poco tiempo y la de los inversores? Según José Lizán, gestor de magnum sicav en Quadriga Funds, “La compañía tiene un desafecto general en la comunidad inversora" y recuerda que "una vez perdida la confianza es muy difícil de volver a recuperar".
A pesar de que sus títulos podrían experimentar un rebote, Alberto Iturralde, responsable de Operativa Dax, advierte de que "un valor que está dañado de por sí, no puede estar en nuestra cartera, aunque pueda tener rebotes".