Invertir y hacer el bien ayudando a combatir el cambio climático, incentivar la investigación en medicina, o abogar por la igualdad social. De eso se trata la Inversión Socialmente Responsable conocida como ESG, que toma cada vez más protagonismo en las carteras de los fondos por su capacidad de ser rentable.
“Cuando tu inviertes, quieres que ese dinero tenga una contribución en la sociedad o el medio ambiente. Que no solo contribuya a la rentabilidad de tu cartera, sino también a crear una mejor sociedad”, comenta Elena Guanter Ros, Directora de Candriam.
Las personas cada vez son más conscientes de cuidar el medio ambiente y cambian sus hábitos de consumo. Si las empresas que crean productos sostenibles, por ejemplo, “subirán más en bolsa”. Así lo analiza Luis Martín, director de Ventas de BMO Global Asset Management. Estas compañías aparte de ser buenas para el medio ambiente, “serán más rentables que las tradicionales”, añade.
“Si estamos tomando medidas sostenibles y las estamos llevando a nuestra rutina, es importante trasladarlo a cómo invertimos”, sugiere Ana Rosa Castro Aguilar, Sales Iberia de Nordea Asset Management.
- Oportunidades de inversión en tiempos de incertidumbre
- La ISR se dispara en España: supera los 200.000 millones de euros
Rentabilidad y menor riesgo
Estos fondos, según los expertos, no solo brindan rentabilidad, sino que además “minimizan riesgos”. “Hay compañías que pueden tener un impacto más alto que otros, no solo en reducir un impacto negativo en sociedad, sino también en reducir el riesgo a la hora de invertir”, sostiene Lorenzo Parages, director Comercial de March Asset Management.
Al estar comprometidas con la sociedad, estas empresas no se ven involucradas en escándalos como en el de Volkswagen con las emisiones contaminantes.
“Hay un consenso de que estas compañías son más seguras y menos volátiles que las tradicionales”, asegura el director de Ventas de BMO. “Es intentar ver si esa compañía tiene en vigor los mecanismos para evitar posibles accidentes”, añade.
Criterios para ser socialmente responsable
La sigla ESG en inglés o ASG en español, corresponde a los criterios que debe tener una empresa para ser socialmente responsable. Por un lado, en lo que refiere a lo ambiental, luego a lo social o cómo cuida a sus empleados, clientes y proveedores, y finalmente a su gobernanza.
Este último punto, en el que se analiza el equipo directivo de la empresa, se trata de elegir empresas que no estén involucradas en casos de corrupción y sean coherentes con sus objetivos.
“No es solo decir ‘soy responsable’, sino que hay factores cuantitativos y cualitativos, que se deben demostrar que se estén llevando a cabo”, asegura Castro Aguilar. Desde Nordea Asset Management contaban con la empresa Facebook dentro de sus fondos de inversión, pero tras el escándalo de Cambridge Analytica, debieron quitarlo de su cartera.
Falta información
Solo 2 de cada 10 inversores conocen la inversión en ESG, asegura Guanter Ros desde Candriam. Por eso, entiende que las gestoras tienen que hacer un esfuerzo para informar a los empleados para que conozcan esta opción. “Más de la mitad querrían invertir una vez que lo conocen”, sostiene.
Martín sugiere que todas las gestoras elaboren un índice de aquellas empresas que están cumpliendo con los objetivos para brindar mayor información a los inversores.