Imaginen que les hacen una foto sin su permiso y es utilizada con fines publicitarios ¿qué harían? Se trata de dos mujeres que vestían traje de baño y fueron conscientes de que les hacían la foto en unos baños públicos pero nunca imaginaron que iban a ser la portada de un festival y aparecer en varias publicaciones.
Es un caso que conocimos ayer y que se ha resuelto tras la oportuna reclamación de las afectadas pidiendo su compensación por los daños producidos.
Se ha comprobado que no dieron la autorización y no tuvieron oportunidad de dar su prohibición porque no conocían ni siquiera qué se iba a hacer con la foto. Esto significa que hubo una intromisión ilegítima que obliga a quien lo hizo a responder ahora del daño que por su negligencia ha causado.
Hay que recordar que siempre es necesario que prestemos nuestro consentimiento para este tipo de cosas aunque nos digan o veamos que no exista ánimo de lucro.
Siempre existe un ámbito reservado para la vida privada que nos protege frente a intromisiones arbitrarias.
En este caso, el tribunal va a considerar que merecen los retratados una indemnización por el daño moral producido.
En conclusión, el festival de cine de verano va a tener que indemnizarlas con 6.000 euros por la difusión de la imagen en el cartel anunciador del evento.