La Reserva Federal (Fed) se mantiene en su postura: Tres bajadas de tipos este año.
Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, confirma que harán lo necesario para devolver la inflación a su objetivo. El tono es más duro que hace unos meses.
(Reuters) - Los funcionarios de la Reserva Federal de Estados Unidos aún prevén recortar las tasas de interés tres veces este año, pero en general se han vuelto más agresivos que hace tres meses, cuando publicaron sus anteriores pronósticos.
Nueve de los 19 responsables de política monetaria de la Fed prevén tres recortes de tasas de un cuarto de punto este año, y otros nueves proyectan dos o menos. Sólo uno prevé más recortes que la media, frente a los cinco de diciembre.
Las nuevas proyecciones sugieren que los responsables de política monetaria están más inclinados a mantener las tasas más altas durante un mayor periodo de tiempo para asegurarse que la inflación no se estanque por encima de su objetivo del 2%, o se dispare de nuevo.
Para finales de 2025, los funcionarios prevén un tipo de interés oficial del 3,9%, según la mediana de sus proyecciones, lo que implica tres recortes más de un cuarto de punto porcentual el año próximo. En diciembre, la mediana de los responsables políticos preveía un tipo del 3,6% a finales de 2025.
Se mantienen los tipos
La banda actual de las tasas de interés, reafirmada el miércoles, es del 5,25%-5,5%.
Las previsiones no son una opinión consensuada, reflejan las expectativas individuales de los siete gobernadores de la Fed de Washington y de los 12 presidentes de los bancos de la Reserva Federal.
Antes de la reunión de junio de la Fed se conocerán varios datos más sobre la inflación y el mercado laboral, por lo que muchas cosas podrían cambiar. Unas cifras de inflación más moderadas podrían reforzar las expectativas de recortes de tasas para entonces, mientras que unas más elevadas podrían retrasarlas.
Pero, al menos hasta ahora, las presiones sobre los precios, más elevadas de lo previsto desde principios de año, parecen haber empezado a erosionar la confianza de los banqueros centrales en el avance de la inflación hacia el objetivo del 2%.
Los responsables prevén ahora que la inflación según el índice de precios de los gastos de consumo personal, terminará este año en el 2,4%, pero que la inflación subyacente se situará en el 2,6%.
En diciembre, la previsión para ambas medidas era del 2,4%.
Para finales del próximo año, los funcionarios de la Fed prevén que la inflación general medida por el índice PCE se reduzca al 2,2%. En diciembre, la mediana de las previsiones para finales de 2025 era del 2,1%.
En conjunto, las nuevas proyecciones sugieren que se sigue confiando en un aterrizaje "suave" de la economía, en el que la Fed controle la inflación sin dañar gravemente el mercado laboral.
Los funcionarios aumentaron sus previsiones de crecimiento económico para este año al 2,1%, desde el 1,4% en diciembre, y esperan que el PIB crezca un 2,0% el año que viene, frente al 1,8% que esperaban anteriormente.
Prevén que la tasa de desempleo, que subió el mes pasado al 3,9%, aumente al 4,0% a finales de año -frente al 4,1% de diciembre-. Y ahora esperan que termine 2025 en el 4,1%.
Los responsables políticos también modificaron notablemente su visión a largo plazo de la tasa de interés oficial de la Fed, que ahora se sitúa en el 2,6%, frente al 2,5% anterior.
Esto sugiere que el banco central podría no tener que reducir tanto los costos de endeudamiento para alcanzar un nivel que, en una economía saneada, no fomente ni desincentive la inversión y la contratación.