El conflicto militar en Oriente Medio, que se suma al de Ucrania, pone de relieve cómo las compañías de defensa han venido para quedarse, mientras los gobiernos aumentan sus presupuestos en este sector. Las compañías de defensa suben en Bolsa, ¿hasta dónde llega el potencial de un sector al alza?
El estallido del conflicto en Oriente Medio, que se suma a la guerra en Ucrania, añade presión a los estados para aumentar sus presupuestos en defensa.
Es pronto para predecir las consecuencias económicas que va a tener el conflicto en Oriente Medio, pero los expertos ya señalan algunas cuestiones obvias:
Por un lado, que los bancos centrales, que tanto han luchado contra la inflación, pueden ver una nueva subida de los precios, dadas las renovadas presiones inflacionistas, entre otras cosas por el encarecimiento del petróleo.
Y, además, es evidente que esta situación vuelve a asestar un golpe a la confianza económica, mientras prosigue, al mismo tiempo, el conflicto en Ucrania y cuando el mundo se sigue recuperando de los efectos de la pandemia.
Una nueva amenaza que no se sabe hasta dónde puede llegar, según ha señalado hoy en Capital Radio Nicolás Fernández es director de análisis del Banco Sabadell. El experto apunta que ya hoy hemos visto caídas para las firmas relacionadas con viajes y subidas para las firmas de defensa y relacionadas con el petróleo.
Antonio Castelo, especialista en mercado de iBroker, explica que, por ahora, el impacto es limitado, porque se entiende que es un conflicto local, mientras no se impliquen otros actores internacionales. No obstante, hay valores afectados, como los relacionados con los viajes, y otros que se ven impulsados.
Este nuevo conflicto se suma al que se mantiene en curso en Ucrania y que ha puesto en alerta a todo el mundo, pero sobre todo a Europa, lo que se traduce también en un mayor gasto en sus presupuestos.
El presupuesto de gastos previstos aprobados para el Ministerio de Defensa en 2023 en nuestro país supone un 25,8% más que en 2022.
Mientras, Europa se plantea la posibilidad de un presupuesto común. El miembro del comité ejecutivo del BCE, Fabio Panetta, defendía hace unas semanas que un presupuesto central permanente ayudaría a incrementar el gasto en investigación y desarrollo en defensa en Europa en el actual entorno geopolítico.
Nombres propios en el mercado
Teniendo todo esto en cuenta, Pablo García, director de Divacons Alphavalue, señala que, en este caso, lo importante es tener en cuenta el incremento en gasto en defensa a medio plazo. En todo caso, ya hay valores que lo vienen haciendo bien, por el conflicto de Ucrania, y que pueden ver nuevas alzas ante la situación actual.
Algunas opciones a tener en cuenta son la italiana Leonardo, que acumula alzas en lo que va de año del 63%. Por ello, su potencial es más limitado. Los expertos le dan un margen de subida del 4%.
La alemana Rheinmetall suma un 24% en este ejercicio. El consenso de analistas todavía le da un potencial alcista del 23%.
En el caso de la estadounidense Lockheed Martin, en el acumulado del año está en negativo, con una resta del 16%, por lo que puede estar en un momento atractivo para entrar. El consenso de analistas recogido por Reuters le da un potencial de casi el 23,5% para los próximos doce meses.
Además de mirar directamente a las empresas, se puede optar por uno de los múltiples ETFs que se centran en el sector.
En junio, la OTAN pedía que el objetivo del 2% del PIB en inversión en Defensa (objetivo acordado en 2014) ya no sea un techo, sino un mínimo del que deben partir los países miembros de la Alianza. A día de hoy, 22 de los 31 aliados están por debajo de ese 2%. Subir hasta ese porcentaje también puede ser un impulso para estas empresas.