CapChase es una fintech que “ha llegado para cambiar el modelo de financiación para startups”. Se ponía en marcha en 2020 en plena explosión de la pandemia, fruto de una necesidad que sus fundadores se habían encontrado a la hora de afrontar la búsqueda de financión para crecer en un proyecto anterior.
Su objetivo es adelantar esos ingresos futuros para que las compañías que están en esas fases iniciales pero cuentan con ingresos recurrentes puedan tener acceso al capital e invertir justo cuando lo necesitan para crecer. "Cada euro que tengan hoy vale mucho más que el dinero que puedan tener mañana”, explica el cofundador de la compañía, Ignacio Moreno.
CapChase juega con la ventaja de la comodidad y la velocidad al apoyarse en un modelo de financiación basado en datos y evita el efecto dilutivo que supone para las startups acceder a rondas de financiación a cambio de una participación en el capital. Lo que hacen, en su lugar, es cobrar entre un 6 y un 12% de comisión a las empresas que financian, dependiendo del riesgo de la operación.
Escucha la entrevista completa en este podcast de Mercado Abierto:
Hablamos en Mercado Abierto con Ignacio Moreno Pubul, cofundador y responsable de producto de CapChase, Fintech que financia a startups
Complemento al venture capital
Moreno asegura que la alternativa de CapChase se puede ver como un complemento a la financiación vía venture capital. "Una compañía que esté pensando en una ronda de financiación puede plantearse levantar menos y complementarlo con nuestro producto para, cuando llegue el momento, estar en una fase valoración más grande, con más ventas y con más crecimiento", señala.
Un dato interesante al analizar la financiación que han facilitado hasta el momento tiene que ver con que el 15% ha ido a startups lideradas por mujeres o minorías, pese a que no tienen políticas específicas que lo persigan. El proceso que sigue CapChase se basa simplemente en los datos, es el material con el que trabajan, de modo que se evitan muchos sesgos subjetivos que sí pueden darse cuando se acude a una vía de financiación tradicional.
La compañía se marca como objetivo a medio plazo construir nuevos productos financieros y expandirse a más países en Europa.