Villalba, cuenta sus inicios en el mundo del tenis y su llegada a Madrid para, además de concluir sus estudios, intentar conseguir sus objetivos de una jugadora que se define como "muy cabezota".
No hay que perderse sus reflexiones sobre los porqués de sus cambios de pareja y también sobre el circuito profesional y el papel de las chicas en él. Reconoce que, ahora mismo, necesita dar clases para poder seguir viviendo de este deporte y que, según el ranking, el número de chicos que lo hacen es menor que el de las féminas.
Aquí tienes la entrevista Al Resto con Mari Carmen Villaba