La vida es como un reloj de arena, es una historia a medio contar que a veces se queda estancada en el tiempo, es una canción que de repente te trae de vuelta a alguien casi sin querer. Madrid son momentos, son instantes, son minutos donde miles de personas se están recordando.

Conocer la vida es luchar para que tus pedazos no sirvan para mantener completos a otros. La vida es no quedarte esperando a que algo suceda. Pero yo te doy 12 motivos para quedarte conmigo  y ver pasar las estaciones… ¿aceptas el reto?

  1. No te vayas este otoño que dicen arrastrará viento y arrancará las hojas del Retiro. Te digo que respires como un pulmón más y no te quedes sin aliento. Descubramos los túneles abovedados de ‘las Estufas’ y convirtámonos en el binomio perfecto que se cuenta sobre el ‘Ángel Caído’.



  1. Quédate y no dejes que Madrid cuente la historia de tu ausencia, no hagas que tengamos que abrazarnos en la distancia.



  1. Quédate para hacer de mis domingos viernes, que Malasaña sea testigo de tu risa, Chueca de tu ingenuidad y el Paseo del Arte tenga envidia de la sonrisa que te dibujo.



  1. Quédate para que los abrazos del verano no se acaben y septiembre no nos quede tan lejano.



  1. Quédate y léeme como las historias egipcias que se cuentan de Debod. Sabes que es un lugar especial donde el alcance de la vista se pierde ante yacimientos y murallas árabes. Hazlo conmigo, sé curioso, pero no cuando me hayas olvidado.




  1. Quédate y píntame castillos y palacios haciendo que su estructura y diseño no tengan nada que envidiar al Real, al de Cibeles o al Sorolla.


Las calles, los edificios, las personas que van y vienen han conseguido inspirarme en un segundo. Nosotros ya vamos por el ecuador. ¿Me continúas acompañando? El 6 es como un guiño a la línea en la que nos conocimos, circular como nuestros caminos a pesar de que tú te fuiste a la izquierda y yo a la derecha…Sin saber que el mundo era redondo.

  1. Quédate y comámonos San Antón, San Miguel, La Latina y San Ildefonso y hagamos de las alturas nuestro particular Faro de Moncloa.



  1. Si no tuvieras miedo, ¿qué harías? Te invito a conocer el andén 0 de Chamberí, un espacio diferente para el arte, ese que tanto te gusta. Como 0 también es el kilómetro de Sol del que parten todos los caminos.



  1. Quédate para callejear sin rumbo ni mapa, sólo escuchando las canciones de Sabina, esas cuyos versos dicen amar por Alcalá y la Plaza del Dos de Mayo. Sé el ‘Caballo de Cartón’ sin corazón solitario.



  1. Quédate y no le demos la razón al error de cálculo. Grita desde las Torres Kio que has decidido que seamos nosotros.



  1. Quédate y haz que la Gran Vía sea la espectadora de nuestros secretos. Desafía sus reglas, salta entre sus edificios y desobedece para ganar en diversión.



  1. Esta es la peor parte de todas… que nos hemos convertido. Tú en mi relato y yo en tu fragancia porque como sabes, amigo, a veces los olores regresan en forma de recuerdo…


Creo que acaba de sonar el despertador y es el de tus sueños. Te he visto salir corriendo… Mis mariposas también lo han decidido, han desplegado alas y han volado lejos de tu boca porque dejaste desordenada mi cama, mi pelo y hasta mi nombre.

Querido, Madrid siempre será Madrid pero tendrá un poquito de nuestro sur para que las ganas nos lleven a perder el norte.

Vuelve, vuelve porque Madrid no se conoce en una vida.