Cinco años han pasado desde que Wallbox diera su primer paso. Este viernes en Sobre Ruedas, Enric Asunción, CEO de la compañía española, se ha sentado en nuestro programa. Una tecnología llamada a revolucionar el mundo eléctrico.
Un joven ingeniero que arrancó en Applus Idiada en El Vendrell, como responsable de la línea de cargadores de los coches eléctricos, de ahí saltó a la imponente Tesla que desembarcaba en Europa. Dos años en la gigante estadounidense hasta que en 2015 arrancó la aventura de Wallbox y que de primeras consiguieron 300.000 euros.
Ahora cinco años más tarde acaba de lograr 23 millones de euros gracias a la firma de capital de riesgo Seaya Ventures, a Endeavor Catalyst, y a Iberdrola para impulsar el crecimiento internacional de Wallbox en China y América del Norte.
Actualmente, su capacidad de producción es de 500.000 cargadores por año en su sede de Barcelona, donde se acomete la investigación, el desarrollo técnico, las pruebas de productos y la fabricación. Y uno de sus proyectos estrella es el Wallbox Quasar, un cargador que permite freír un huevo frito con la carga de la batería del coche eléctrico. Aunque todavía no está en el mercado español.
Triunfo en Estados Unidos
"El Wallbox Quasar desbloquea una de las emocionantes tecnologías del automóvil eléctrico: la capacidad de usar la batería para alimentar su hogar o vender energía a la red», defendió la publicación Engadget para entregar el galardón de tecnología más innovadora en movilidad en el CES 2020.
Este CES, la española ha presentado Quasar, el primer cargador EV bidireccional del mundo para el hogar. Es decir, la batería del coche puede encender las luces del salón. "Un paso importante para el autoconsumo energético", apunta Enric Asunción.