El 5G ya es una realidad, al menos en España. Este sábado, Vodafone ha traído la primera red comercial de la conexión de quinta generación, que traerá velocidades de descarga ultra rápidas.
Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Málaga, Bilbao, Vitoria, San Sebastián, La Coruña, Vigo, Gijón, Pamplona, Logroño y Santander son las primeras ciudades españolas que reciben conexión 5G de forma comercial.
Vodafone España se adelanta a su matriz de Reino Unido, previsto para julio, e Italia, lanzará sus servicios 5G este domingo.
Un cambio de velocidad inesperado y que llega a medio gas con "un 50% de cobertura de las poblaciones incluidas en el lanzamiento", apunta Antonio Coimbra, CEO de Vodafone España en la presentación del evento.
Tecnología del futuro, donde España busca ser pionera, y que está por desplegar e implementar.
En la actualidad, el mercado español cuenta con tres marcas con dispositivos 5G listos para funcionar con las nuevas velocidades que ofrece Vodafone y donde se sumarán más adelante el resto de operadoras.
Samsung, LG y Xiaomi son las marcas elegidas por la británica para lanzar su nueva estrategia, Huawei sigue “en pausa” y lo hacen “por prudencia empresarial” debido al veto de Estados Unidos.
A fecha de enero de 2019, Vodafone ha gastado 198,1 millones de euros por 90 MHz de espectro para desplegar su 5G, lejos de los 132 millones pagados por Orange y casi el doble de lo desembolsado por Movistar (107,4 millones).
Por cada MHz, Vodafone y Orange han pagado 2,2 millones de euros, pero la compañía británica cuenta con sus 90 MHz en un bloque común lo que le permite un mayor aprovechamiento del espectro que sus rivales.
Sin embargo, la apuesta por el 5G, aún por calibrar, destaca por el pausado despliegue del resto de sus competidores en esta nueva tecnología.
Un giro estratégico tomado por la británica y que parece no haber tenido seguimiento por los clientes.
"Nuestra salida del fútbol cambiará las reglas de juego y los resultados se verán en dos o tres años", apuntó Antonio Coimbra, CEO de Vodafone España, el pasado mes de diciembre.
El adiós al deporte rey se produjo tras el verano de 2018 y el número de abonados a sus servicios de televisión cayeron de 1.35 millones en el segundo trimestre de 2018 a 1,28 millones en los tres meses siguientes, según datos de la CNMC.
Más agravante es la caída en los ingresos de televisión de pago. Tras el verano, justo coincidiendo con el pistoletazo de salida de la temporada de La Liga, los ingresos cayeron un 31,1% hasta los 42,81 millones de euros, según la CNMC.
En los ingresos de los servicios minoristas por operador, por primera vez en la serie histórica recopilada por la CNMC, Orange ha conseguido superar a Vodafone en el último trimestre de 2018.
La guerra del fútbol ha supuesto un duro varapalo a las cuentas de la filial británica en España. El número de clientes ha descendido y el impacto en las cuentas es importante.
Vodafone registró una facturación interanual de 4.688 millones de euros en el último ejercicio hecho público por la compañía.
Coimbra en el foco
La decisión de no apostar por los derechos de televisión del fútbol, Telefónica pagó más de 4.000 millones, apunta a una persona, Antonio Coimbra.
Los focos se dirigen hacia él. Desde su llegada en 2012, en plena crisis económica, la operadora británica ingresaba 6.042 millones de euros en su negocio español.
Ahora se ha reducido una cuarta parte y además, Orange le ha superado como segundo competir en el mercado español.
Los últimos movimientos de Vodafone España no han estado exentos de críticas. En 2014, la compañía desembolsó cerca de 7.200 millones de euros para hacerse con ONO. Operación para "reforzar su conexión de fibra óptica en España".
Un paso en falso que le llevó a desembolsar en 2017, 1.256 millones de euros para mejorar la red de fibra que acababa de adquirir, ya que no soportaba determinadas capacidades.
Además, se sumó un ERE que afectó a 1.000 personas y donde hay que añadir otro expediente de regulación de empleo a otro millar de trabajadores este ejercicio.
Colgadas las botas, Vodafone ha apostado por las tarifas ilimitadas desde el pasado mes de abril, que cuentan "con 200.000 líneas y 140.000 clientes", según explican sus directivos.
5G ilimitado
La operadora británica será así la primera firma en empezar a operar el 5G en España, un estándar que lanzará también el domingo en Italia, el 3 de julio en el Reino Unido y en agosto en Alemania. Ahora sólo Suiza tiene 5G, lanzado en abril por la operador Swisscom.