El ataque del grupo terrorista palestino Hamás sobre Israel ocupa toda la actualidad mundial. Sin embargo, en Ucrania la guerra no se detiene y los apoyos son cada vez menores. Por eso, el país del este de Europa ha comenzado a sondear a los inversores sobre sus planes para reestructurar los 20.000 millones de dólares de deuda internacional gubernamental, y baraja además la posibilidad de recaudar nueva financiación, según publica en exclusiva la agencia Reuters.
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La colaboración económica hacia Kiev ha perdido fuerza con el paso de los meses y el estallido de la tensión Hamás-Israel aleja el foco del conflicto europeo.
Con el flujo de noticias pendientes de la franja de Gaza, los tenedores de bonos ucranianos, que en agosto de 2022 habían acordado congelar los pagos durante dos años por los efectos devastadores de la invasión en la economía de Ucrania, el plan de Kiev pasa ahora por acceder a los mercados para financiar el conflicto bélico mientras su programa del Fondo Monetario Internacional se extiende hasta 2027.
De esta forma, Ucrania emitiría nuevos bonos para los tenedores existentes después de acordar las pérdidas de la deuda aún vigente. Sin embargo, los inversores esperan que los socios de Ucrania actúen como avalistas por el riesgo inherente que conlleva prestar dinero a una nación en guerra.
El respaldo se deteriora
Por un lado, Estados Unidos, cuyas ayudas a Ucrania se elevan por encima de 73.500 millones de dólares entre apoyo económico y militar y ayuda humanitaria, se encuentra sumergido en un bloqueo institucional en medio del acuerdo para evitar el cierre de la Administración.
La Ley que firmó Joe Biden a última hora para que su Gobierno no cayera en pérdidas dejó a Ucrania como el gran damnificado. El texto no incluye los fondos para continuar con la asistencia militar al país invadido por Rusia. Es más, el núcleo de republicanos más radicales comienzan a estar en contra de prolongar las ayudas a Kiev.
Por otro lado, en Europa la situación no es más halagüeña. Durante el primer año de conflicto, La Unión Europea proporcionó 67.000 millones de euros de apoyo económico, humanitario y militar a Ucrania. Un apoyo que, ocho meses después, en palabras de la presidenta de la Comisión, supera los 82.000 millones de euros. Es decir, prácticamente el 82% de la ayuda comunitaria a Ucrania llegó durante los primeros doce meses de conflicto.