Los mayores accionistas de Thyssenkrupp y Kone se plantean la unión de ambas empresas. De producirse esta fusión, se crearía la compañía más grande de ascensores del mundo, un 40% más grande que Otis, ahora mismo la empresa líder del sector. Actualmente, Thyssenkrupp ocupa el tercer lugar en esta lista (tras Otis y Schindler) y Kone el cuarto lugar.
Las primeras conversaciones entre Kone y Thyssenkrupp ya tuvieron lugar hace dos años. El grupo alemán rechazó la idea por querer mantener a toda costa el control de su unidad de negocio. La propuesta fue relanzada recientemente por su ya ex jefe ejecutivo, Heinrich Hiesinger.
Ahora, la fundación Alfried Krupp, propietaria del 21% de Thyssen y Antti Herlin, máximo accionista de Kone, retoman las conversaciones para la fusión. Una unión que lanzaría a ambas empresas al liderazgo del sector.
La fundación, con dos asientos en la junta de supervisores de Thyssenkrupp, dijo anteriormente que nunca se produciría una ruptura del conglomerado industrial. El presidente de la compañía, Ulrich Lehner, reafirmó estas palabras, manteniendo que no había planes de vender la unidad de ascensores del grupo, su negocio con más beneficios.
En cambio, la compañía inversora Cevian, segundo mayor accionista de Thyssen con un 18%, ha llamado a una revisión estratégica de todas las áreas de negocio del grupo, diciendo que todas ellas podrían progresar mejor con una configuración diferente.
La especulación sobre el futuro de Thyssenkrupp se ha intensificado tras la reciente dimisión de Heinrich Hiesinger, quien habló de una falta de apoyos por parte de los accionistas. La renuncia de Hiesinger llegó solo unos días después de cerrar un acuerdo con Tata Steel y tras meses de presiones de los accionistas sobre la estrategia de la empresa.