Telefónica ha celebrado su junta general de accionistas, de manera telemática, en la que se ha aprobado el reparto de un dividendo flexible y voluntario. Su presidente, José María Álvarez-Pallete, ha querido destacar el papel fundamental de las comunicaciones durante la pandemia. La firma aprueba el dividendo y se refuerza en sus mercados clave.

Álvarez-Pallete ha hilado su discurso haciendo un paralelismo entre esta pandemia y la de 1918. Según ha señalado, la principal diferencia ahora, en 2020, es que las comunicaciones han servido para que no se paralizase la vida.

Además ha definido Telefónica como una “compañía solidaria, fiable y preparada para el futuro”, que ha estado a la altura durante la pandemia, dando servicio a consumidores y empresas.

Su objetivo, la generación de caja

Según ha explicado el presidente de Telefónica, el objetivo financiero para este ejercicio es optimizar la generación de caja. También ha querido destacar el aumento del flujo de caja libre del último año.

La junta ha aprobado además que el pago del segundo tramo del dividendo de 2019 de 0,2 euros se realice en junio próximo. El primer tramo de 2020 se pagará a finales de este año, mediante la modalidad de scrip dividend.

Sobre el comportamiento de la acción, ha dicho que se está viendo afectada por la crisis del coronavirus y también por el crecimiento de la competencia. Pero confía en que el trabajo que están haciendo, para cumplir sus objetivos financieros, se refleje en la cotización.

Y es que la firma ha cumplido con los objetivos financieros y no financieros en 2019, con su compromiso de mantener el dividendo, y con las primeras fases del plan de ejecución de la Nueva Telefonica.

Un plan puesto en marcha el año pasado, que contempla centrarse en sus cuatro mercados clave (España, Brasil, Reino Unido y Alemania).

Álvarez-Pallete ha repasado los principales logros del pasado ejercicio y el cumplimiento de los compromisos y objetivos financieros y no financieros. Los primeros, gracias a la consolidación de la senda de crecimiento, a la sólida generación de caja y a la reducción de deuda, de hasta 15.000 millones desde 2016.

En este sentido ha añadido que “para este año 2020 nuestro objetivo financiero es optimizar la generación de caja. Y contamos con un balance sólido y una fuerte posición de liquidez para afrontar los vaivenes de esta crisis. Seguiremos invirtiendo, seguiremos reduciendo deuda y seguiremos manteniendo un dividendo atractivo y sostenible”.

Reuters