Cada vez son más los expertos y empresas que creen que el blockchain (cadena de bloques) podría jugar un papel importante en el sector energético. Esta tecnología es una base de datos online compartida que funciona como un registro abierto de transacciones y, por tanto, elimina la necesidad de una autoridad central que actúe de intermediaria para respaldar dichos movimientos.
El experto en tecnología y socio director de LTC Madrid, Roberto Espinosa, explica que la utilización de este sistema podría romper el modelo centralizado en el mercado energético actual, además de ayudar a reducir costes y precio e impulsar las energías renovables. Pone de ejemplo una vivienda o empresa que utilice paneles solares. Actualmente el exceso de suministro se vierte en la red central para ser distribuido y comercializado por las compañías eléctricas, pero con el blockchain se podría dar el soporte tecnológico necesario para crear un sistema en el que dichos hogares o empresas sean autónomos y realicen transacciones automáticas puerto a puerto con sus vecinos, sin necesidad de intermediarios.