El motivo, según el informe de envejecimiento poblacional de Funcas, es el descenso de la natalidad y el hecho de que esos que están alcanzando edades tan avanzadas son ni más ni menos que la generación del baby boom, una generación muy abundante en comparación con las generaciones posteriores.
También aumenta exponencialmente el número de personas mayores de cien años. Para el año que viene se espera que haya unos 15.000 centenarios en España, mientras que solo 46 años después, en 2066, ese número subirá hasta 220.000 personas.
Este cambio en la pirámide poblacional española presenta varios problemas para la economía. Por un lado, cómo afrontar el cuidado de nuestros mayores. Porque ahora somos los propios familiares los que nos hacemos cargo de los mayores. Pero cuando llegue un punto en el que no podamos conciliar el trabajo con tantos años de cuidados, ¿dónde está la solución? El problema está en las pensiones y en los cuidados para dependientes.