Prepárese para la escasez de semiconductores hasta 2023. La advertencia llega de IDC. Según la consultora la falta de microprocesadores en todo el mundo continuará durante la primera mitad de 2022 y se podría alargar, con mejoras, hasta 2023. Los principales motivos son la prolongación de la pandemia y la escasez de mano de obra.
IDC explica que a partir de junio la situación podría mejorar, pero añade que la falta de chips no se recuperará por completo hasta 2023. Y es que el próximo año, las limitaciones en el suministro podrían verse aliviadas por la subida de los inventarios y una posible ralentización de la economía.
Industria de la automoción
Según el análisis de IDC, el mercado de la automoción, uno de los más afectados por la escasez de semiconductores, no verá reflejado un progreso en la fabricación de vehículos hasta finales de 2022 y 2023.
En las últimas horas, dos de las mayores automovilísticas mundiales, Ford y Volkswagen, han lanzado advertencias en este sentido. De hecho, Ford acaba de anunciar la suspensión o recorte de producción en ocho de sus fábricas en Estados Unidos, México y Canadá desde esta semana por los problemas en el suministro de microprocesadores. En concreto, la suspensión afectará a las factorías de Muchigan, Chicago y Cuautitlan.
Por su parte, Volkswagen ha advertido en una entrevista en la revista Automobilwoche, que no espera que los problemas de suministro de microprocesadores acaben este año. "La situación volátil nos afectará al menos más allá de la primera mitad de este año", ha declarado Murat Aksel, jefe de adquisiciones de la junta de Volkswagen en la publicación.