A veces la tecnología ayuda a reducir las emisiones de CO2 y consumo de energía. Otras veces, las dispara. Eso le sucede a Google. La compañía estadounidense ha sube un 50% las emisiones de CO2 desde 2019. En 2023 las emisiones de la americana alcanzaron los 14,3 millones de toneladas métricas. Google desborda las emisiones por la intensidad energética de los data centers y la IA. No es la única big tech que enfrenta un problema: Microsoft también observa como sus emisiones crecen a ritmos de doble dígito. ¿Hasta qué punto la incorporación de la inteligencia artificial complica el reto de alcanzar los objetivos de reducción de emisiones? Como recuerda Carmen de Pablo, CFO de Cepsa, la AIE estima que en 2026 los centro de datos consumirán la misma energía que necesita Alemania.
La IA y la intensidad energética que requiere hace que suban un 50% las emisiones de CO2 de Google desde 2019