En Bruselas los ministros de Asuntos Exteriores de Suecia y Finlandia firmarán, tras salvar los escollos de la Cumbre de la OTAN en Madrid, los protocolos de adhesión de sus países a la Alianza Atlántica.
Una paso histórico, así es como se lee, esta mañana, que promete pasar a los libros, en el Paseo de la Castellana, nº15, en la embajada de Finlandia en Madrid. Frente a los micrófonos de Capital Radio, Sari Rautio, embajadora de la República de Finlandia en el Reino de España analiza qué puede suponer que los dos países escandinavos, tradicionalmente neutrales, se hayan decidido por dar este paso en medio de una clima de tensiones bélicas por la guerra lanzada por Rusia en Ucrania el pasado 24 de febrero.
Escucha la "Entrevista Capital" con Javier Luengo en este podcast de Capital, La Bolsa y La Vida:
Sari Rautio, representante diplomática de Helsinki en España, culpa a Rusia de los problemas inflacionistas y de la imposición de un nuevo “telón de acero”
Los encuentros entre la delegaciones surtieron sus frutos. Turquía, antes de arrancar con la Cumbre de la OTAN la pasada semana en esta ciudad de Madrid, levantó el veto y a cambio de ciertas cesiones, permitió, en un primer momento, la entrada de Finlandia junto a Suecia en la organización. Al menos, que se comenzara a recorrer el camino.
El presidente turco, Recepp Tayip Erdogan, se enfrenta de aquí a unas semanas a las urnas. Nos dicen que pudo utilizar su entrada en la OTAN como herramienta para desviar la atención de su población ante los problemas crecientes en su país (inflación, pobreza, terrorismo).
Y precisamente, por esta última baza, la del terrorismo y la devolución por parte de Suecia de 63 combatientes kurdos (ellos consideran organización terrorista) se desbloquearon las negociaciones.
En todo caso Erdogan avisa que su parlamento deberá dar el beneplácito a la incorporación a la OTAN de ambos países y que, dependiendo de cómo avance todo, podría verse un revés en el futuro.
Un documento "acordado con la intención de cumplirlo", pero que a opinión de la embajadora constata una realidad que hace de su país un buen candidato. Rautio, al tiempo, avisa: "estamos juntos con Suecia en esto y no tenemos un plan de cambiar nuestras propuestas".
Finlandizar vs otanizar
Una de las frases que quedará para la posteridad de esta cumbre de la OTAN de Madrid es que Europa se “otaniza” a la contra de lo que Vladímir Putin, a opinión de Estados Unidos, buscaba que era la “finlandización”.
Este eslogan empleado de manera reiterada durante la cita por la administración de Joe Biden hace referencia de su “neutralidad militar” en cualquier conflicto bélico y su papel de mediador en estos.
Una neutralidad histórica que la alta diplomática considera como una política "que funcionaba", pero que ahora ya ha dejado de ser una "política hábil".
"No fue sumisión, pero sí una neutralidad impuesta", aboga Rautio.
Culpa de Rusia
Todo esto en tanto en cuanto el jueves de la pasada semana, tras conocer las conclusiones de la cumbre y el Concepto Estratégico de Madrid, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, dijo que con este nuevo pacto OTAN de aquí a 10 años se levantaba un nuevo “telón de acero” entre Rusia y Europa.
"Si tenemos un nuevo telón de acero será culpa de Rusia", denuncia la embajadora ante los micrófonos de Capital, La Bolsa y La Vida. Más allá de esto, Rautio dice no "tener miedo" de Rusia a pesar de llevar años sufriendo las provocaciones de Rusia: violaciones del espacio aéreo y marítimo, ciberataques…
"Suponemos que se intensificarán los ataques, pero estamos preparados", se defiende la representante del país escandinavo en España.
Un camino fuera de la OTAN
Hasta ahora Finlandia se ha situado en los márgenes de la OTAN, pero desde 1994 como socios externos y con un fortalecimiento de las relaciones, especialmente, tras 2014 cuando Moscú entró en Crimea.
Tras un siglo bajo el control zarista, Finlandia se enfrentó hasta en dos ocasiones a la URSS. Una afirmación que la embajadora pone en duda y puntualiza: "Finlandia no se enfrentó. Se defendió de un ataque injustificado".
"Cuando tras la Guerra Fría el mundo desmanteló sus ejércitos, Finlandia lo reforzó e invirtió mucho más dinero", apostilla Rautio al tiempo que descarta la presencia de fuerzas OTAN desplegadas en su país en los meses que viene.
Calendario acelerado
La entrada de Finlandia y Suecia en la OTAN parece ser que será un proceso acelerado por la urgencia del momento (el parlamento finés dio el visto bueno a la petición con apenas 8 negativas y 3 abstenciones).
En todo caso Jens Stoltenberg, el secretario general, ya ha avisado que tampoco de hoy para mañana. Este martes se firma en Bruselas el protocolo de adhesión.
"De aquí a un año seremos miembros de pleno derecho de la OTAN", vaticina la embajadora quien considera que su país puede llevar a la Alianza una visión "nórdica y del Ártico" al resto de socios.
El papel de la OSCE
Helsinki han salido grandes acuerdos históricos. A la cabeza vienen los pactos de 1975 en los que se consagra la inviolabilidad de las fronteras europeas y rechazan todo uso de la fuerza y toda injerencia en los asuntos internos. Firmados por 35 Estados entre los que estaban Estados Unidos, Canadá y la todavía por entonces la URSS.
De estos nació la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE). Helsinki presidirá el organismo en 2025. Rautio trabajó en Moscú entre 2005 y 2008.
"Estamos condenados a entendernos y tenemos que ir en ese camino", termina concluyendo la embajadora de Finlandia.