La cumbre empresarial organizada por la CEOE continúa hoy con la participación de representantes del comercio, un sector que pide un plan de ayuda al Gobierno y evitar que la economía se convierta en un "infierno fiscal".

Pedro Campo, presidente de la Confederación Española de Comercio (CEC) ha puesto el acento en la necesidad de un plan específico de ayuda al sector, así como de una campaña de concienciadión, para fomentar el comercio local y de proximidad.

Desde Google España, Fuencisla Clemente, hablaba de la digitalización e impulsar el ecommerce, además de la necesidad de impulsar la transformación.

No es el momento de subir impuestos

Marc Puig, presidente de Puig y del Instituto de la Empresa Familiar, pedía que se nombre un ministro para liderar la recuperación y también se dirigía a la oposición, para instarles a remar todos en la misma dirección.

Ha pedido además que no se suban los impuestos a los que ya los pagan, sino que se persiga la economía sumergida.

En el mismo sentido, Alfonso Merry del Val, presidente de Anged, que agrupa a las Grandes Empresas de Distribución, decía que no debe convertirse la economía en un "infierno fiscal".

Merry del Val aboga además por llegar un gran pacto nacional por la recuperación, señalando que el Gobierno de España todavía no ha trazado un camino claro a seguir para salir de la crisis.

Y para su sector, apuesta por flexibilizar los horarios de apertura, para competir en igualdad de condiciones con el comercio electrónico.

Antonio Garrigues Walker, presidente de ASEDAS, la Asociación de Empresas de Supermercados, ha ido más allá y ha asegurado que España tiene una tarea pendiente con el comercio, "no sabemos vender, vendemos poco y mal".

Según ha subrayado, tenemos menor cuota de mercado que otros países europeos, por ejemplo en nuestras ventas a Asia. Hasta que eso no mejore, asegura "que no seremos un país influyente".

Por eso pide a los políticos que se comprometan para mejorar esta situación y que colaboren con los empresarios.

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