El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pide a los republicanos que se sienten a negociar de forma inminente para aprobar su plan de infraestructuras por valor de 2,25 billones de dólares. Su objetivo es aumentar la competitividad frente a China.
Así lo justificó el mandatario estadounidense: "¿Piensan que China está esperando para invertir en infraestructura digital, investigación y desarrollo? Les prometo que ellos no están esperando y cuentan con que la democracia estadounidense sea muy lenta, demasiado limitada y demasiado dividida".
Joe Biden ha anunciado que: "en las próximas semanas, la vicepresidenta Kamala Harris y yo nos reuniremos con los republicanos y los demócratas para escuchar a todos. Estaremos abiertos a las buenas ideas y a las negociaciones de buena fe, pero hay algo a lo que no estaremos abiertos: no hacer nada. La inacción simplemente no es una opción".
El presidente estadounidense mencionó algunas críticas de los conservadores sobre su iniciativa, que la consideran "demasiado amplia", además de proponer centrarla en las infraestructuras tradicionales.
Subida de impuestos a las empresas para financiar el plan
Joe Biden afirmó que está abierto a escuchar ideas sobre cómo financiar el paquete de medidas, con una excepción: "No impondré ningún aumento de impuestos a la gente que gana menos de 400.000 dólares al año".
Por ello, el presidente ha propuesto incrementar el impuesto de sociedades al 28%, una decisión que ha suscitado críticas no solo entre los republicanos, sino también entre los demócratas.
De hecho, el Departamento del Tesoro de EE.UU. ha recomendado en un informe de 19 páginas el llevar a cabo una subida de impuestos sobre las empresas para recaudar 2,5 billones de dólares a lo largo de 15 años.