La llegada de los Reyes Magos marca el final de las fiestas navideñas, y como es tradición el esperado roscón de Reyes se convierte en el protagonista de desayunos y meriendas.
Este año, los fabricantes industriales de roscón esperan aumentar sus ventas un 5%, lo que supone superar los 29 millones de unidades según previsiones de la Asociación de la Industria de Panadería, Bollería y Pastelería.
También coinciden en esta tendencia al alza desde la patronal de supermercados Asedas y compañías de distribución como el Corte Inglés, que estiman incrementos respecto al ejercicio anterior de entre el 8 y el 20%.
Otra tendencia es la mayor demanda de roscones mas pequeños, de entre 250 y 500 gramos, en comparación con los de 1,5 o 2 kilos de los roscones de "toda la vida". Esto se debe a que se trata de un dulce que se consume en los hogares y las familias ya no son tan numerosas como antes.
Por su parte, los pasteleros artesanos también esperan una buena campaña de roscones, aunque este año quieren reivindicar todavía más su producto. Aseguran que no tiene nada que ver con los producidos de manera industrial y que la diferencia reside en la calidad de los ingredientes, y la elaboración continua para poder comprarlo recién hecho. Aunque hay algo que está claro, sea cual sea el elegido el roscón será el gran protagonista.