El gigante Tesla, uno de los claros ganadores de la crisis del coronavirus en bolsa, ha dado conocer una propuesta de ampliación de capital para recaudar 5.000 millones de dólares en el mercado, en lo que supone su segundo movimiento de este tipo en tres meses.
El fabricante de automóviles eléctricos saca provecho de un repunte meteórico de sus acciones este año y anuncia esta ampliación que, dada la capitalización de mercado de la compañía, de 598.000 millones de dólares, representa menos del 1% del valor de la empresa. Tesla no ha puesto una fecha determinada para la finalización de esta ampliación de capital, con la que apela al mercado para financiarse.
El plan llega en un momento clave para Tesla, dado que está en pleno proceso para construir nuevas fábricas en Alemania y Texas como parte de su expansión global y eso requiere mucho capital. La compañía ya había advertido a los inversores durante la presentación de resultados del tercer trimestre sobre sus planes para gastar 2.500 millones de dólares en 2021 y 2022. Los gastos operativos de Tesla aumentaban un 33% en el tercer trimestre con respecto a los tres meses anteriores. No hay que olvidar que en septiembre, la empresa llevaba a cabo otra ampliación también por 5.000 millones de dólares.
Los analistas señalan que este anuncio sostiene el argumento alcista para el valor aún más, que la empresa está en una clara posición de fuerza y que sus directivos están recaudando suficiente capital para lograr que su balance y estructura fortalezcan su creciente posición de caja, de cara a salir lentamente de su situación de deuda.
En lo que va de año, la compañía se dispara más de un 670% y el próximo 21 de diciembre entrará a formar parte del índice S&P 500.
Elon Musk se muda a Texas
Elon Musk, ha abandonado California y se ha mudado a Texas para enfocarse en el desarrollo de su prototipo Starship para enviar a personas a Marte y la Luna en el sur de Texas y en una nueva planta de ensamblaje de Tesla en Austin y por ello ha decidido su traslado.
El fundador de Tesla se enfrentó en mayo a las autoridades de California por las medidas de confinamiento que obligaron al cierre temporal de su única planta de ensamblaje de vehículo en Estados Unidos y por "romper las libertades".
Esta decisión también tiene una explicación fiscal. Musk, se muda a un estado que no tiene impuestos sobre la renta personal, mientras que California aplica los más altos del país a sus residentes más ricos.