El Grupo Prisa vive momentos difíciles. Bajo la estrategia de Juan Luis Cebrián su deuda llegó a dispararse hasta los 6.000 millones de euros. Una hipoteca para su futuro en un contexto de incertidumbre para los medios de comunicación. Durante los últimos años, esa brecha se ha reducido, pero aún quedan 750 millones de euros por pagar y esa deuda expira a partir del próximo año. Por ello, el grupo de comunicación que engloba medios como El País, Cinco Días o Cadena Ser, esboza desde hace meses una reestructuración de esa deuda.
Según varias informaciones, Pacific Investment Management Company (Pimco), el mayor acreedor del grupo, ha dado su visto bueno para alargar el vencimiento del pasivo más allá de 2030, pero con una condición, la continuidad de Joseph Oughourlian, desde este lunes presidente de El País. Ahí empiezan los problemas. Una serie de accionistas próximos a Moncloa quieren destituir al francés, propietario de Amber Capital, el máximo accionista de Grupo Prisa.
La refinanciación de la deuda y la presencia del inversor francés Joseph Oughourlian condicionan la composición del Grupo Prisa
Un dardo contra Moncloa
Antes de nada, cabe repasar brevemente la trayectoria de Oughourlian en el conglomerado. Presidente no ejecutivo del grupo desde 2021, el parisino cumple una década en el consejo de Prisa.
El inversor ha celebrado su nuevo cargo con una publicación en el medio. Oughourlian ha hecho un alegato por “mantener los valores de la cabecera pese a las presiones de todo tipo”.
¿A qué se refiere el inversor? Es un dardo lanzado con toda la intención hacia Moncloa.
¿Qué pinta el Gobierno en todo esto?
El conflicto entre el Ejecutivo y el accionista mayoritario de Prisa nacía a finales de febrero. Moncloa anhelaba impulsar una nueva televisión dentro del grupo, una iniciativa que Oughourlian cortaba de raíz.
El papel de Grupo Vivendi
Hablamos de uno de los grupos mediáticos más importantes de Francia. Creador de Canal Plus, está en las antípodas ideológicas del Ejecutivo español, pero puede ser su socio en esta operación.
Ya sabemos qué es Vivendi, pero además de lo descrito, hablamos del propietario del 12% de Prisa, un valor aproximado de 50 millones de euros en Bolsa.
Ese porcentaje es clave para poseer el control ejecutivo del grupo. Vivendi ha estado del lado francés de la historia, pero una oferta suculenta podría hacer cambiar de opinión al conglomerado francés.
Para hacernos a la idea, Oughourlian tiene el 30% de Prisa en propiedad, aunque podría tener el favor del 35% del accionariado. Es decir, ese 12% de Vivendi le garantiza una mayoría virtual. Sin ese favor, Moncloa ve opciones de sustituir al nuevo presidente de El País.
Un grupo de inversores afines al Gobierno encabezados por Andrés Varela Entrecanales y José Miguel Contreras podría comprar la participación del grupo.
¿Qué gana Vivendi si vende?
Interesante pregunta que responde Telefónica. Recordemos que el 10% de la teleco pertenece a la SEPI, el brazo inversor del Estado. También cabe mencionar que el Presidente actual de la operadora, Marc Murtra, es hombre de Moncloa.
Con ese caldo de cultivo, no es de extrañar que este fin de semana, el propio Murtra se reuniera en París con Arnaud de Puyfontaine, presidente de Vivendi, y con el Ministro Óscar López.
Las informaciones dicen que López habría ofrecido a Vivendi entrar en la plataforma Movistar Plus+, parte de Telefónica, si vende su participación en Prisa. Echemos la vista atrás. Vivendi es el fundador de Canal + y lleva tiempo detrás de la división audiovisual de Telefónica, otrora Canal + España.