El beneficio neto ha alcanzado los 357 millones de euros, aumenta un 5% en relación a los primeros seis meses del ejercicio anterior.
La compañía explica que los costes de aprovisionamientos y otros gastos de explotación registran una caída del 1,4% respecto a los del primer semestre del año anterior, poniendo de manifiesto los esfuerzos que Red Eléctrica viene realizando en materia de eficiencia. Los gastos de personal aumentan un 2,3% hasta junio. Este incremento viene explicado en parte por el aumento de la plantilla media del grupo en un 1,4% respecto al mismo periodo del año pasado. La plantilla final se sitúa en 1.804 personas a 30 de junio, mientras que la plantilla media ha sido de 1.810 empleados.
A partir de este trimestre se incluyen en el ebitda los resultados de la empresa chilena TEN, en la que REE tiene un 50 %, que ha aportado 4,3 millones en el semestre. La cifra de negocio ascendió a 990,3 millones entre enero y junio, lo que supone un incremento del 0,3 %. Esta mejora se debe al aumento de la retribución por las actividades de operación del sistema, que alcanza los 32,9 millones, y de las telecomunicaciones, que suman 45 millones.
Buenos resultados para la analista de Renta 4 Banco, Nuria Álvarez.
El Grupo Red Eléctrica invirtió 183 millones en la primera mitad del año, de los que 154 millones se destinaron al desarrollo de la red nacional de transporte, un 6,6 más que en igual periodo de 2017.
Al desarrollo del negocio internacional se destinaron 17,4 millones, frente a los 42,2 millones de 2017, cifra que incluía la compra del 45 % del capital de Redesur.
La deuda neta del Grupo Red Eléctrica se situó al cierre del primer semestre en 4.491,2 millones, un 6,3 % por debajo de los 4.791,8 millones contabilizados al término de 2017.