Estados Unidos crece a un ritmo del 3,5%. Así se desprende de la lectura final de PIB que este jueves se ha publicado en el país y que supera la previsión del mercado de un crecimiento del 3,3%. La mayor expansión de la economía estadounidense obedece a un mayor gasto de los consumidores (3,0%) y a una mayor inversión de las empresas (1,4%). Además, aunque la inversión en vivienda cae, el descenso es menor a las previsiones iniciales.

Los datos de mayor crecimiento económico se producen en pleno proceso de cambio en Estados Unidos ante la inminente llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y ante la expectativa de que la Reserva Federal pueda subir los tipos de interés en tres ocasiones en 2017. Respecto a Trump, los economistas esperan una política fiscal expansiva que estimule más el crecimiento y la creación de empleo. Este escenario podría traer inflación y llevar a la Fed a elevar el precio del dinero para evitar un recalentamiento económico y controlar una posible escalada de precios. Este escenario es el que ha descontado el dólar en las últimas semanas. De hecho el billete verde ha llegado a marcar máximos de 14 años en su cruce contra el euro.

En Capital Radio, Rodrigo García, analista de XTB, ha asegurado que el dato confirma que hay una economía mundial de dos velocidades y un cambio de ciclo en EEUU.