La cadena de supermercados líder en Reino Unido, Tesco, se hace con el control de Booker por 4.400 millones de euros y retoma el pago de dividendos para 2017-2018. Tras el anuncio de esta operación, Tesco subía un 8,54% en bolsa a las 10:35 GTM, mientras que Booker lo hacía entorno al 16,4%.

Con este acuerdo, Tesco reafirma su dominio en el negocio de alimentación británico, tras haber estado envuelto en un escándalo contable. El consejero delegado de Tesco, Dave Lewis, insiste en que esta compra es un movimiento de oro que mejorará las perspectivas de crecimiento de la cadena.

En los últimos años, Aldi y Lidl, principales competidoras de Tesco, habían conseguido más terreno en el negocio de la alimentación.  Ahora Lewis espera que Tesco refuerce su posición como la número uno de los supermercados, gracias a esta nueva adquisición.

Tesco aprovecha esta operación corporativa para retomar el pago de dividendos en su ejercicio fiscal 2017-2018. Es una señal de salud financiera de la líder de los supermercados británicos, después de que no pagara dividendos a sus accionistas de finales de 2014.