Jerome Powell sustituirá a Janet Yellen al frente de la Reserva Federal. Según The Wall Street Journal, el presidente Donald Trump ya ha notificado al gobernador su intención de nombrarle presidente de la FED, aunque tendremos que esperar a que se confirme de forma oficial este mismo jueves.

Powell, de 64 años, se unión a la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal en 2012, una posición desde la que ha respaldado públicamente el plan del banco central de aumentar gradualmente los tipos de interés, por lo que es probable que su mandato represente una continuidad con el trabajo de Janet Yellen. Nunca ha disentido con el mandato de la presidenta de la FED, aunque ningún miembro de la Junta lo ha hecho desde el año 2005. Algunas fuentes aseguran que en 2012 mostró su escepticismo sobre la tercera ronda de flexibilización cuantitativa, pero terminó votando a favor de la propuesta del entonces presidente de la FED, Ben S. Bernanke.

Se le califica como neutral en política monetaria, en comparación con Yellen a quien se ve algo pesimista. Una encuesta de Bloomberg lo clasifica como “dovish” o “paloma” y sería, por tanto, más favorable a políticas expansivas como las implementadas a raíz de la crisis financiera. Con el cambio de rumbo, Powell ha respaldado el plan para reducir gradualmente el balance de 4,5 billones de dólares, algo “apropiado” y donde las reacciones del mercado “auguran una eliminación paulatina de las reinversiones”, según dijo en junio.

Powell ha apoyado también otro tipo de medidas, como las reformas que incorporaba la Ley Dodd-Frank después de la recesión del periodo 2007-2009, aunque también está abierto a disminuir la carga sobre las empresas financieras cambiando la llamada Regla Volcker, que tiene como objetivo evitar que los bancos realicen apuestas arriesgadas utilizando dinero de los contribuyentes. Precisamente, este podría ser uno de los puntos a su favor que ha visto Donald Trump en el proceso de elección del nuevo líder de la FED. Powell, que fue designado para formar parte del organismo por el expresidente demócrata Barack Obama, también podría tener el apoyo de este partido.

Desde su llegada a la FED este abogado de formación lideró la respuesta del organismo a la caída repentina de la deuda del Tesoro en 2014 y la revisión del índice de referencia del LIBOR. También ha sido una persona clave en las negociaciones de la Junta de Gobernadores durante la supervisión del sistema de pagos financieros.

Anteriormente trabajó en el Departamento del Tesoro durante el mandato de George H.W. Bush. Multimillonario, según su documento de divulgación financiera de 2016 con activos de hasta 55 millones de dólares, también ha pasado por el banco de inversión Dillon Read & Co y por Carlyle Group, donde creó el grupo industrial de la empresa de capital riesgo.