En las elecciones generales de este 23 de julio se ha batido récord en solicitudes de voto por correo: más de 2,6 millones de personas lo han solicitado. Si has votado por correo y lo solicitaste de manera electrónica puede dejar en manos de los ciberdelincuentes todos tus datos... En El Balance analizamos los principales riesgos de ciberseguridad a los que se enfrentan los ciudadanos que han solicitado de forma telemática el voto por correo en estas elecciones. Cuidado, puedes caer en un engaño...

Escucha el pódcast de la entrevista a Roger Gallego, Iberia Sales Manager de Delinea, en El Balance, con Aida Skirej y Federico Quevedo aquí:

Roger Gallego: ''El voto por correo tiene el riesgo de la suplantación de identidad

En 'El Balance', Federico Quevedo entrevista al 'Iberia Sales Manager' de Delinea Roger Gallego para hablar sobre los riegos que corre el voto por correo.

Las elecciones son una oportunidad de oro para ciberdelincuentes para realizar ataques de suplantación de identidad. La mayoría busca el rédito económico a través de la suplantación de identidad, tener acceso a recursos y datos de los que puedan sacar dinero, ya sea vendiéndolos o explotándolos o pidiendo recompensa a los afectados. En un entorno como el del voto por correo esto no es diferente: acceden a todo tipo de información crítica de usuarios y empresas.

El riesgo más común es el 'phising'

El ataque principal al que estamos más expuestos es el phising, el envío de correos electrónicos o SMS que son falsos pero parece que, en este caso, proceden de Correos. Roger Gallego recomienda que al principio hay que ser desconfiado, estar alerta y evaluar qué nos están pidiendo.

Otro riesgo es la denegación de servicio, que consiste en realizar muchas peticiones válidas a un sistema electrónico que evita que ese sistema pueda funcionar porque se sobrecarga.

Quienes aún no hayan votado por correo, el único riesgo que corren es el del phising. Ignora mensajes en los que avisen o alerten de algo y pidan hacer click en un enlace. Y así, evitarás caer en un engaño.