El intercambiador de autopistas de Miami, la reconstrucción de la estación Soutch Ferry del metro de Nueva York en el bajo Manhattan o la rehabilitación del lago Owens en California. Son algunas de las infraestructuras estadounidenses que dependen de una empresa española, OHL. El negocio en el bloque Canadá-Estados Unidos supone el 30% de sus ingresos, y la mayor parte del mismo se concentra precisamente en el área estadounidense.

El vínculo de ACS con Estados Unidos también es importante. En el primer semestre del año la producción de ACS en el país supuso 6.000 millones de euros de ingresos de los 16.400 millones computados por el grupo en todo el mundo.

Construcción de tramos de autopistas, rehabilitación de centros de estudios, museos, construcción de oficinas o rehabilitación de tramos de metro, figuran entre los proyectos de ACS en el país.

OHL y ACS, pero hay más conocedoras de las infraestructuras y los servicios estadounidenses como FCC y Ferrovia. Ahora la pregunta es si el anunciado plan de Donald Trump para renovar las infraestructuras, puede animar la actividad de estas empresas en Estados Unidos

El plan de Trump

500.000 millones de dólares de inversión en infraestructuras es la promesa de Donald Trump, y quien sabe si otro más de los motivos de su victoria. Para un país con 5.600 hospitales, 98.000 colegios públicos, 19.000 aeropuertos (entre los públicos, los privados y los militares), 228.000 kilómetros de red ferroviaria o 260.000 kilómetros de carreteras interestatales.

En Mercado Abierto hemos hablado de todo ello con Germán Loperna, Vicepresidente del European American Enterprise Council. Puedes escuchar el audio de la entrevista aquí: