El Consejo de Política Fiscal y Financiera ha aprobado elevar dos décimas el objetivo de déficit público para las Comunidades Autónomas (CCAA) en 2019. Por lo tanto, pasa del 0,1% al 0,3% del PIB, lo que se traducirá en un incremento de recursos de alrededor de 2.400 millones de euros. Lo ha hecho con el voto a favor de las regiones gobernadas por el PSOE, excepto Valencia, que se ha abstenido, y la oposición del PP y de Canarias, además de Ceuta y Melilla. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, explica el reparto de los objetivos



Además, el Gobierno y las comunidades se han comprometido a crear una comisión sobre la reforma de la financiación autonómica. Ahora tiene que aprobarlo el Congreso y el Senado

Las comunidades gobernadas por el PP explican que se han opuesto porque se incrementan los problemas de endeudamiento. La consejera de Economía y Hacienda de Castilla y León, Pilar del Olmo, asegura que lo que debería hacerse es aumentar los recursos a través de los ingresos.



El consejero de Hacienda de Castilla La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, reconoce que les vendrá bien esos recursos para pagar políticas del gobierno central.



La ministra, María Jesús Montero reconoce que, aunque no se ha discutido en el CPFF de la reestructuración de la deuda, la ministra ha garantizado que habrá un trato igualitario para que puedan beneficiarse de esas medidas todas las comunidades que cumplan los requisitos que se fijen. La idea es que se acojan sobre todo las autonomías con mayor endeudamiento, como Cataluña y la Comunidad Valenciana, de manera que puedan encajar mejor las obligaciones a las que tienen que hacer frente.