Rodilla está de cumpleaños y quiere celebrarlo por todo lo alto. Y es que 80 años no se cumplen todos los días. La revolución llega a la cadena que festeja su aniversario fusionando lo mejor de su pasado con lo mejor del porvenir. En definitiva, un cumpleaños muy especial que marca un antes y un después para la marca.

Tras ocho décadas de experiencia en el sector, Rodilla se siente más joven que nunca y con toda la energía para llegar hasta donde tú nos quieras llevar. Además, una poderosa filosofía nos acompañará durante este nuevo año: Rodilla Revolution, un concepto que simboliza la entrada en escena de la cadena en nuevos territorios y con una nueva imagen. Buena muestra de ello son sus nuevos uniformes, que se han presentado de la mano de dos nuevos embajadores de lujo: Alaska y Mario Vaquerizo, quienes se unen a la gran familia Rodilla que, como Madrid, ahora es también su casa.

Además de estrenar los nuevos uniformes y de cantar el Cumpleaños feliz, y para sorpresa de los clientes que hoy se han acercado a Rodilla Serrano 41, Alaska y Mario han sido los encargados de servir los desayunos a los comensales. Todo el dinero recaudado durante el evento se donará a la Fundación A LA PAR, que trabaja por los derechos y la participación de las personas con discapacidad intelectual en la sociedad.

Pero esto no es todo, ya que, aunque estemos de celebración, seguimos queriendo intentar generar un impacto positivo en nuestra sociedad. Por eso, este año también se inaugurará de la mano de la Fundación A LA PAR, el primer Rodilla cuyo equipo estará integrado por personas con discapacidad intelectual. Otro granito de arena a través del cual demostramos que todos juntos podemos y debemos transformar nuestro entorno.