La primera discusión del Consejo Europeo de hoy se centra en los refugiados y en la posibilidad de poner fin a las cuotas obligatorias de acogida. Aunque el presidente Donald Tusk quiere que en la cena de esta noche se consiga reactivar la política de asilo común, también se hablará de la decisión de Estados Unidos de trasladar a Jerusalén su embajada en Israel. El viernes, ya sin la primera ministra británica los 27 esperan dar su visto bueno a los avances logrados en la primera fase de negociación y aprobar unas directrices para empezar a negociar la segunda.

Cuando Theresa May creía que tenía vía libre para formalizar hoy el paso a la segunda fase de las negociaciones del brexit un nuevo revés complica las conversaciones. La primera ministra británica "ha sufrido un revolcón" en el parlamento inglés después de que los partidos de la oposición y un grupo de conservadores disidentes hayan votado a favor de obligar al Gobierno a pedir permiso a las dos cámaras antes de implementar el acuerdo. El analista político económico, Carlos Puente Martín, cree que esto cambia el encuentro europeo de hoy, pero espera que no frene las negociaciones en cuanto a los derechos de los ciudadanos y la frontera de Irlanda.



Pero el brexit no es el único problema de la Unión europea. Bruselas tiene que lidiar con unas relaciones exteriores complicadas, la tensión reavivada en Jerusalén, Corea del Norte e Irán. En la agenda de hoy también se discutirá el futuro de la política de asilo común.

En cuanto a la economía, Carlos Puente Martín considera que no veremos plasmadas a corto plazo propuestas como la del superministro de la eurozona, aunque cree que es importante avanzar en este sentido para resolver de una vez problemas pasados, como la falta de una unión bancaria real.