En toda España, el sector de las oficinas y los centros de trabajo suma más de 30 millones de metros cuadrados, un valor estimado por encima de los 65.000 millones de euros y unas rentas anuales cercanas a los 5.000 millones de euros, según estimaciones de la Asociación Española de Oficinas (AEO).

Pero a pesar de estas cifras, se trata de un mercado que hasta hace muy poco ha estado falto de consenso en aspectos tan básicos como qué es un metro cuadrado o qué es un edificio de oficinas de calidad. Algo tan elemental como la unidad de medida y la calidad de producto de un sector económico que en los dos últimos años ha generado una inversión cercana a los 4.000 millones de euros.

Debido a estas circunstancias, uno de los principales objetivos de la AEO en los últimos años ha sido crear herramientas que establezcan criterios únicos, adaptados y aceptados por el mercado español, que faciliten la actividad para todo el sector: inversores, propietarios, intermediarios, abogados y, en general, todo el conjunto de profesionales y actividades de esta industria.

En 2014 vio la luz el “Estándar AEO para la Medición de Espacios de Oficinas” y en 2017 la AEO lanzó al mercado el “Modelo AEO para la Clasificación Técnica de Edificios de Oficinas”, el primer “rating” español que determina de manera objetiva la calidad técnica de un edificio conforme a 45 parámetros.



 Desde marzo de 2017 en España los edificios de oficinas ya pueden tener nota a través del rating que ha puesto en marcha la AEO. En la actualidad no existe ninguna certificación como esta, solo sellos más parciales que se otorgan, por ejemplo, sobre la eficiencia energética. El edificio de Castellana 200 es el primer edificio de oficinas que certifica su calidad técnica en España.   La Asociación Española de Oficinas (AEO) le ha otorgado la certificación de  calidad técnica B+, según el “Modelo AEO para la Clasificación Técnica de los Edificios de Oficinas" 

"La AEO cuando inició este trabajo identificó que no existía un análisis técnico propiamente dicho en el mercado de oficinas. Realmente lo que se necesitaba era introducir el concepto de calidad con el de ubicación, rentas, servicios... Pero es curioso que no existía un análisis técnico propiamente dicho, en cierta forma es como un raiting inmobiliario. En todos los sectores hay un raiting: financiero, gastronómico, hotelero...pero en el sector de oficinas no existía y esto como consecuencia generaba un déficit de información para agilizar la toma de decisión de los procesos de inversión del inmueble y lo que ha hecho la AEO es crear una herramienta que ayude en todo este proceso", explica Enrique Andreo,  director de Desarrollo y Estudios de la AEO.

Desde el punto de vista del propietario en inmuebles de oficinas, Torre Rioja afirma que "esta calificación es un ejercicio de transparencia. Hasta ahora había dos certificaciones extranjeras: Breeam, y Lead y la AEO complementa con su calificación porque había varios parámetros que son comunes  pero la AEO introduce criterios de eficiencia, funcionalidad del edificio, aspectos arquitectónicos, etc que los otros sellos no tienen. Antes no se podía clarificar salvo que fueras edificio a edificio y con esta calificación se estandarizan todos los criterios de comparación de edificios y eso es la bondad que tiene esta certificación de la AEO", apunta Ángel Soria, presidente de Torre Rioja

En esta misma línea, Diego Valiente, director de Patrimonio en GMP, Sociedad de Inversiones Inmobiliarias, declara que "igual que la medición de los edificios es absolutamente positiva para homogeneizar los estándares en el mercado, desde el punto de vista de los inmobiliarios también nos ayuda. En GMP siempre hemos apostado por las calificaciones en todos nuestros edificios, primero para ver cómo lo estamos haciendo y que lo confirme un tercero y segundo, porque ofrecemos al mercado, una garantía. Las certificaciones que había antes no englobaban todo y ahora esta certificación está muy enfocada al mercado español y va a permitir comparar inmuebles comparables que están en ubicaciones similares y sobre todo, a raíz de los informes, nos va a permitir ver donde tenemos que actuar".

Desde el punto de vista de una consultora como Gesvalt, evaluador homologado del nuevo raiting de la AEO, "para nosotros la aparición de este sello además de facilitar la comparabilidad es saber porqué se compara y ver que ventajas o inconvenientes tienes frente a un edificio u otro. Es una herramienta  que enriquece el análisis porque le da una base de rigor", asegura Sergio Espadero, director de Advisory Services de Gesvalt.

 

Puedes escuchar todo el debate a partir del minuto 30.

http://capitalradio.es/audios/20180118_INVERSION_INMOBILIARIA.MP3