2. - Cataluña, aunque es la primera economía de España con un PIB superior a los 200 mil millones de euros, es la segunda receptora de inversión extranjera. También es la segunda en población, con cerca de siete millones y medio de habitantes. Y es la tercera que más crece, un 3,3% en el último año.
Sin embargo, está en cuarto lugar en PIB per cápita, que es de 27.700 euros por persona.
3.- Ese cuarto lugar es el que ocupa por deuda pública, que supera los 72.600 millones de euros. Si bien, es la séptima mejor comunidad por tasa de paro, que está en el 16%.
4.- Con estas coordenadas, la economía de Cataluña debería estar en mejor lugar a la hora de ser la elegida para hacer negocios. Pero no es así. El informe Doing Business del Banco Mundial la retrasa hasta un triste sexto lugar dentro de España, noveno si miramos las dificultades para abrir un negocio o hasta el puesto 11 si se trata de obtener permisos y licencias.
5.- Es mucho más fácil abrir una empresa en Andalucía, Madrid, Cantabria, Asturias o en la Comunidad Valenciana, que en Cataluña. Menos costoso en trámites, aunque no tanto en días o capital requerido.
6.- Y si centramos la pregunta en las facilidades para poner en marcha una PYME industrial, entonces Cataluña desciende hasta el puesto 17 de 19. En este caso pueden tardarse 118 días de media, frente a los 64 de Galicia o los 80 de Madrid, y el coste es el más alto del estado.
7.- El problema está en la Administración, y en los trámites y las tasas que hay que pagar. De media, casi dos terceras partes son tasas municipales. Y Cataluña tiene el triste récord en este coste empresarial.
8.- Los permisos, licencias y autorizaciones son un mal muy extendido en todo el sur de Europa. En Cataluña el coste dobla la media de la Unión Europea. Dentro de España, ocupa el puesto número 11 en la clasificación de facilidades administrativas.
9.- Si tomamos el ejemplo del coste de obtener los permisos de construcción, Cataluña ofrece los peores niveles de la Union Europea, superiores incluso a los de Portugal. En tiempo, sí está en la media española.
10.- Estos datos muestran que, a ojos de inversores y empresarios, Cataluña penaliza hacer negocios más que otros lugares del entorno. El impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales alcanza el 10% del valor de la propiedad, más del doble que Austria, diez veces más que en Chile o Polonia.
11.- Entre las ventajas competitivas están la cercanía a la frontera y un puerto de alta capacidad, el de Barcelona. Sin embargo, es el tercero de España por volumen de contenedores. Algeciras y Valencia más que duplican este tráfico.
12.- La gran fortaleza de la economía catalana es su potencia exportadora. La cuarta parte de las exportaciones españolas salen de Cataluña. Este año marcará un nuevo récord, como ya lo hiciera el pasado. Químicos, bienes de equipo, automóviles y alimentos son sus productos más competitivos.
13.- Y junto con las exportación, el gran atractivo turístico, que crece cada año con nuevo récord de visitantes. En 2015, más de 19 millones de personas.
14.- Por lo visto, y lo conocido, las conclusiones de este informe señalan como las grandes fortalezas de la economía en Cataluña su dinamismo económico y empresarial, su potencia exportadora y su atractivo turístico.
Sus debilidades más visibles son los excesivos obstáculos administrativos, sus altos impuestos y la persistente incertidumbre política.
El informe fue discutido en La Gran Tertulia de la Economía por:
- Sergi Farré, Portavoz y Asesor Diplomático de la Unión por el Mediterráneo
- Ramón Adell, vicepresidente de Foment del Treball y CEDE
- Joan Ramón Rovira, estudios de Cambra Barcelona
- Oriol Aspachs, director de macroeconomía de Caixabank Research
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