Reino Unido se echa las manos a la cabeza después de que Honda haya anunciado el cierre de su planta en el sur de Inglaterra para 2021. Una pérdida de 3.500 empleos con el culpable ya habitual en los despidos del sector: el Brexit.

Reino Unido pierde a su quinto mayor productor de vehículos. Una pata fundamental en una industria, la automotriz, que maneja algunos de los principales hilos de la economía británica. Una industria que factura 82.000 millones de libras al año, emplea a más de 850.000 personas y supone el 4% del PIB británico. Una industria que se desmorona por la incertidumbre de una salida sin acuerdo de la Unión Europea.

Porque sí, mucho se habla de la repercusión del Brexit en el sector bancario, pero al británico de a pie lo que le preocupa es si estas turbulencias en el sector auto pueden causar una brecha en su industria manufacturera.

La fabricación representa casi una cuarta parte de la economía de Reino Unido y más de 7 millones de empleos dependen de ella. Dentro de esta industria, 186.000 empleos directos vienen del sector auto.

El secretario de negocios de Reino Unido, Greg Clark, ha hablado hoy de la incertidumbre entre los fabricantes británicos en plena Conferencia Nacional del sector Manufacturero:
Por supuesto, esta noticia se suma a los meses de incertidumbre que los fabricantes han tenido que soportar sobre el Brexit y nuestra futura relación con la Unión Europea. Sé lo importante que es para ustedes que encontremos pronto una resolución de lo que será nuestra relación con la Unión Europea. Cada decisión que se tome sobre los precios, el flujo de caja, la logística y la inversión tiene consecuencias reales para los cientos de miles o, más bien, millones de personas, que emplea la industria.

Los empleos en el sector auto van en decadencia: a los 3.500 despidos de Honda con el cierre de su planta hay que sumar otros miles. El mayor productor de coches de Reino Unido, Jaguar Land Rover, anunció hace apenas un mes un recorte de 4.500 empleos y la mayoría de ellos son británicos. A ello sumará una segunda fase de un plan de bajas voluntarias en Reino Unido. También Ford Motor anunció despidos en el país, sin dar una cifra exacta, pero lo cuantificó en miles.

Más de 30 fabricantes producen más de 70 modelos de vehículos en el Reino Unido con el respaldo de 2.500 proveedores de componentes. Son los responsables del 12% de las exportaciones del país y más de la mitad de los coches que salen de sus fábricas caen en la Unión Europea.  Ninguno de ellos, ni Jaguar Land Rover, ni Nissan, ni Mini, ni Toyota, por mencionar a los cuatro de mayor peso, quiere afrontar los 2.700 millones de libras al año a las importaciones y los 1.800 millones a las exportaciones que supondrían un Brexit sin acuerdo.