Talgo obtuvo un beneficio neto de 59,6 millones de euros en 2015, un 55 % más que los 38,5 millones de 2014, apoyada en una mejora de los ingresos del 35 %, hasta los 520 millones de euros, según la información remitida por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El resultado bruto de explotación o ebitda se elevó un 49,4 %, hasta 104 millones, en línea con la evolución de los ingresos de la empresa, que hoy ha subrayado que prevé pagar su primer dividendo en la segunda mitad de este año con un porcentaje de beneficio destinado a retribuir al accionistas (pay-out) del 20% -30 %.

Talgo explica que sus cifras de 2015 reflejan la ejecución de la cartera contratada (con los proyectos de Meca-Medina y Kazajstán principalmente) y el incremento de los servicios de mantenimiento, donde señalan el potencial de crecimiento a medida que entreguen pedidos.

Los mercados internacionales, subraya, han ido incrementando su presencia dentro de la actividad de Talgo hasta representar el 79 % de las ventas medias de los últimos años. Así, el 76,1 % de la cartera actual de proyectos de la empresa se desarrolla fuera de España, principalmente en Arabia Saudí.

En este contexto, la empresa apunta que las recientes dificultades registradas en los mercados de materias primas (petróleo) están impactando en algunos de sus clientes y que, aunque el alcance global de los contratos no se verá reducido, sí se podría tener que ajustar el ritmo de fabricación de algunos contratos.

Talgo señala que, a cierre de 2015, contaba con una cartera contratada de 3.117 millones, lo que supone seis veces los ingresos. Las inversiones en 2015 sumaron 10,3 millones, mientras que la deuda financiera neta se sitúo en 125 millones al cierre del ejercicio.

De cara a los próximos ejercicios, la empresa señala que ha identificado "un amplio número de futuras oportunidades esperadas de ser adjudicadas en los próximos 4 años" en las que "actualmente trabaja con el fin de posicionarse de manera favorable".