El BCE pondrá en marcha en marzo el nuevo programa de compra de bonos, un total de 60.000 millones al mes, hasta finales de septiembre de 2016, o al menos hasta que los precios en la eurozona se estabilicen alrededor del 2%. Las compras las realizarán los diferentes bancos centrales nacionales,  por separado, y dependiendo del capital key.



De este modo, el "programa de compra de activos ampliado" o expansión cuantitativa del BCE destinará 1,14 billones de euros durante los próximos 19 meses a intentar reactivar la economía de la eurozona y que la inflación regrese a niveles acordes con el objetivo de estabilidad de precios de la institución, algo por debajo del 2%.

No obstante, Draghi subrayó que este programa de adquisición de activos públicos y privados se mantendrá en todo caso hasta que se aprecie un ritmo sostenido en la inflación consistente con el objetivo de estabilidad del BCE, por lo que podría continuar incluso más allá de septiembre de 2016.

Las compras de la entidad comenzarán el próximo mes de marzo y se realizarán en función del capital clave de los bancos centrales nacionales miembros del BCE. Este programa incluirá los existentes programas de compra de activos, incluyendo los bonos garantizados y deuda empaquetada o titulizaciones.

En cuanto a la gestión de los riesgos de estas adquisiciones, Draghi explicó que el 20% de las compras estará sujetas al régimen de compartición de riesgos, mientras que el 80% restante corresponderá a cada banco central nacional.

El BCE ha reducido el interés de estas subastas desde el 0,10% aplicado en las dos ya celebradas en los meses de septiembre y diciembre hasta el 0,05%, nivel actual de los tasa de referencia.