El Gobierno de Italia ultima su respuesta a la CE el día que acaba el plazo para que presente un nuevo presupuesto.
Varias fuentes apuntan a que es muy posible que el primer ministro, Giuseppe Conte se reunirá hoy con sus dos vicepresidentes, Matteo Salvini y Luigi Di Salvo y con el ministro de economía, Giovanni Tria, para preparar la respuesta antes de la medianoche.

La ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, ha insistido en que no cree que vaya a haber contagio a España de la desconfianza que ha generado en los mercados el desafío del Gobierno de Italia a las reglas fiscales europeas. Recuerda que el proyecto presupuestario enviado por el Gobierno a Bruselas que tiene como objetivo lograr en 2019 superávit primario de las cuentas públicas sin poner en riesgo ni el crecimiento económico ni la creación de empleo.

Ayer el Ejecutivo italiano, en voz de Matteo Salvini, se reafirmaba en que hará caso omiso de las advertencias.  No solo de las de la Comisión, sino también las del FMI, del Eurogrupo, de las agencias de calificación de la deuda, de su mismo banco central (Bankitalia), de la Seguridad Social, del Tribunal de Cuentas y de la mayoría de los economistas.

El presidente en funciones del Instituto Nacional de Estadística italiano (Istat) advirtió de que las previsiones de crecimiento del Gobierno italiano son muy optimistas, y avisó de que en el tercer trimestre del año la variación del PIB fue "cero" respecto al anterior, por lo que se evidencian signos de "una fase de debilidad en el ciclo económico".

El borrador está ahora en la Comisión de Presupuestos antes de pasar al pleno del parlamento. El Gobierno italiano ha estimado para 2019 un déficit del 2,4 % del PIB y una deuda del 130 %, prácticamente como la actual.

La Comisión pidió a Italia el pasado 23 de octubre un nuevo plan presupuestario para 2019, en una decisión sin precedentes en la historia de la Unión Europea.