La Comunidad Valenciana ha votado finalmente a favor de los objetivos de déficit y deuda para las comunidades autónomas en el período 2019-2021 tras negociar, entre otros logros, que el Gobierno asuma la deuda de 350 millones de euros del Consorcio Valencia 2007.

Este consorcio está formado por el Gobierno, la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia para gestionar todas las infraestructuras que tuvieron que ver con la celebración en 2007 de la Copa América de Vela.

Fuentes de Presidencia de la Generalitat han informado a la agencia EFE del voto afirmativo en la reunión de hoy del Consejo de Política Fiscal y Financiera, frente a la abstención del pasado 19 de julio. El cambio llega tras las conversaciones mantenidas esta mañana entre el president, Ximo Puig, y el conseller de Hacienda, Vicent Soler, con la ministra María Jesús Montero.

Así que el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) ha aprobado hoy por segunda vez, y sin la participación de Cataluña, los mismos objetivos de estabilidad para las autonomías en el próximo trienio ya aprobados en julio. Esta senda de estabilidad rechazada el mes pasado por el Congreso, ha vuelto a contar con la oposición de las cinco comunidades del PP y Canarias, mientras que han votado a favor las siete comunidades socialistas y Cantabria.

De esta forma, la senda de estabilidad y deuda pública para las CCAA será aprobada este viernes en Consejo de Ministros. Tras este trámite, pasará al Congreso donde PP, Ciudadanos, UPN, Coalición Canaria, Foro Asturias y Bildu la rechazaron y Unidos Podemos, Compromis, ERC y PDeCat se abstuvieron; frente a los respaldos de nacionalistas vascos y PSOE. Por ello, el Gobierno trabaja ahora para recabar apoyos intensificando las conversaciones con Podemos especialmente. Esta misma tarde se reúnen Pablo Echenique y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.