El precio de la vivienda en China ha aumentado en la mayoría de las ciudades desde octubre. Los precios de las casas nuevas, excluyendo las viviendas subvencionadas por el Gobierno, subieron en 62 de las 70 ciudades en marzo, en comparación con las 56 de febrero. Según muestran datos del Buró Nacional de Estadística, los precios cayeron en 8 ciudades.

Las autoridades chinas se han comprometido a cumplir con restricciones estrictas en la mayoría de las ciudades de primer y segundo nivel para evitar así una burbuja inmobiliaria, mientras que tratan de eliminar un número alto de casas sin vender en centros urbanos más pequeños.

En un mes de marzo en el que al menos 64 ciudades anunciaron restricciones en las compras de viviendas nuevas, parte de la demanda podría haber surgido de compradores que acudían al mercado con miedo a que no pudieran realizar futuras compras.

Las ventas de casas nuevas subieron en el tercer mes del año un 18% hasta 1 trillón de yuanes (145 mil millones de dólares) respecto al año anterior. El aumento se compara con un aumento del 23% en los dos primeros meses del año.

En este primer trimestre, los precios de los hogares aumentaron un 0,4% en Pekín, ya que el gobierno municipal aumentó los requisitos de pago para los compradores de una segunda vivienda. En Guangzhou, la última ciudad importante en anunciar las restricciones de compra, los precios subieron un 2,5%. Los precios en Shanghai cayeron un 0,1% el mes pasado, tras un aumento del 0,2% en febrero. Por otra parte, en Shenzhen cayeron un 0,3% en la sexta caída mensual consecutiva.

El mercado inmobiliario superó las expectativas "en todos los índices disponibles" el mes pasado, y las ventas de viviendas se mantuvieron optimistas en abril según Eric Zhang, analista de China International Capital Corp. Según las predicciones de Zhang, consideradas las más altas de la industria en el mercado, las ventas de viviendas ganarán un 15% en valor y un 10% por área este año.