El Gobierno de España se plantea la creación de un impuesto a las empresas tecnológicas como nueva vía para obtener ingresos tributarios. La propuesta se enmarca en la actuación de la Comisión Europea, que comenzó en marzo a debatir una respuesta comunitaria al respecto.



Sin embargo, José Luis Zimmermann, director general de la Asociación Española de Economía Ditital (Adigital), considera que si España se adelanta al debate europeo sería una “acción unilateral” que ya inquieta al sector tecnológico y digital nacional.

“Estamos hablando de una tasa sobre los ingresos, no sobre los beneficios. Sería gravar una serie de actividades enormemente productivas y que tienen que ver con la competitividad del país”, explica Zimmermann. “Va a impactar en vendedores locales, y las empresas españolas van a tener más problemas para su actividad digital”, añade.

El director de Adigital también advierte que este impuesto “se trasladará de forma inmediata a los consumidores españoles”.

En el lado contrario, la semana pasada se mostró a favor de la tasa la directora financiera de Telefónica, Laura Abasolo, tras conocer las intenciones del Ministerio de Hacienda, aunque considera que debe hacerse con un consenso general y coordinado entre los países de la Unión Europea.