El presidente de la CNMV, Sebastián Albella, asegura que intervino prohibiendo las posiciones de venta ("cortos") en Liberbank por la ausencia de informaciones negativas, a diferencia de la situación previa del Banco Popular. 

Albella ha explicado que Liberbank está expuesto a variaciones bruscas derivadas de movimientos de menor consistencia en el mercado."En el caso de Liberbank, los descensos importantes en la cotización, los descensos bruscos y la alta volatilidad que se produjo la semana pasada, en ausencia de informaciones negativas publicados por la entidad, indicaba que lo más probable era que esos movimientos guardaran relación con algo externo a la entidad, que concretamente era la actuación resolutoria sobre el Banco Popular", asegura Albella.

Asimismo, ha apuntado que la misma situación en el caso del Popular habría sido inadecuada. Insiste en que la actividad de los bajistas estaba muy relacionada con la situación y la percepción que el mercado tenía sobre la entidad, por lo que considera que intervenir en las posiciones cortas no hubiese sido conveniente.

Albella asegura que las posiciones cortas en Popular "se han mantenido bastante estables durante los últimos meses. Esto significa que su contribución al mercado, en términos netos, no ha sido una contribución vendedora. Durante las dos últimas semanas la contribución de las posiciones cortas, fue una contribución de tendencia compradora. Por lo tanto, digamos que si en algo influyó, fue para amortiguar el nivel de las caídas".

Respecto a que la compra del Popular por parte del Santander pueda afectar a otro bancos o empresas, Abella destaca que el mercado ya ha digerido el impacto de la noticia, por lo que espera que no se dé el caso. "Confío en que las demás entidades financieras funcionen con normalidad".

El presidente de la CNMV ha abierto hoy el V Foro del Consejero que organizan IESE y KPMG, entre otras instituciones.