El petróleo que se obtendrá en Alaska, que Repsol, junto a su socio descubrió este año, se estima que será equivalente al 25% de la producción actual de líquidos de petróleo de la compañía española.

El consejero delegado de la compañía, en junta general de accionistas, explica que en la próxima campaña de invierno se hará una exploración para la definición completa del campo y la producción de ese yacimiento será de 120.000 barriles de petróleo al día y que se trata de un crudo muy ligero.

En otros asuntos, Josu John Imaz se ha referido al futuro y anuncia una actualización del plan estratégico. Tras la adquisición de Talisman Energy, Repsol lanzó en 2015 una nueva 'hoja de ruta' para marcar el camino a la integración y en el que contemplaba un recorte de inversiones del grupo y un plan de desinversiones para hacer frente al escenario de bajos precios del petróleo.

Imaz destaca un 2016 que fue el primer año en que Repsol funcionó como "compañía integrada" tras la compra de Talisman Energy, lo que generará sinergias de más de 400 millones de dólares en 2020.

En lo que respecta a las desinversiones del grupo, Imaz recordó que asciende a 5.100 millones de euros a cierre de 2016, superando el objetivo fijado en el plan estratégico.

La 'hoja de ruta' de la petrolera identificaba un objetivo de desinversiones total por valor de 6.200 millones de euros a lo largo de todo su periodo, de los que 3.100 millones correspondían a los ejercicios 2016 y 2017, y los 3.100 millones restante a 2018, 2019 y 2020.

Por último, la junta da el visto bueno al pago de un dividendo de 0,45 euros brutos por acción a través del programa Repsol Dividendo Flexible