ING, la compañía holandesa de servicios financieros, ha registrado un beneficio neto de 1.143 millones de euros (1,24 millones de dólares), superior al esperado en el primer trimestre y una cifra que representa un retroceso de 9,1% respecto a 2016. Este resultado se debe al fuerte crecimiento crediticio, a los costes estables y por tener menos préstamos incobrables.

Los analistas de Reuters habían visto el resultado neto subyacente en 1.020 millones de euros, frente a los 1.257 millones de euros del mismo período del año pasado. En 2016, las cifras de ING fueron buenas, con un beneficio único de 506 millones de euros de la venta de acciones de la antigua filial NN Group..

"ING registró un fuerte resultado en el primer trimestre respaldado por su continuado crecimiento comercial", declaró Ralph Hamers, consejero delegado, quien destacó el incremento del 39,3% del resultado antes de impuestos de la entidad, hasta 1.652 millones, mientras que el retroceso del resultado neto "se explica por el beneficio de 506 millones por la venta de acciones de NN Group en el primer trimestre de 2016".

Los ingresos subyacentes de ING Group durante el primer trimestre alcanzaron los 4.396 millones de euros, un 7,5% más que un año antes, incluyendo un incremento del 3,2% de los ingresos por intereses netos y del 12,3% en los ingresos por comisiones.

Por su parte, el ratio de capital básico CET1 de la entidad holandesa se situó al cierre del primer trimestre en el 14,5% desde el 14,2% al cierre del cuarto trimestre de 2016.